Las venas abiertas
El libro Las venas abiertas de América Latina, que Chávez le obsequió "con afecto" a Obama y que lo convirtió de la noche a la mañana en best seller de Internet, es un compendio de vacías estupideces que trata de justificar nuestra indudable inferioridad ante países que han surgido y triunfado. Esta especie de vademécum para idiotas, escrito por el uruguayo Eduardo Galeano en 1971, era como una biblia para los retrógrados izquierdistas de entonces. Narra de manera melodramática y llorona, cómo los cochinos imperialistas (estadounidenses y europeos), a través de los siglos, han succionado la sangre de nuestro violado y explotado hemisferio, convirtiéndolo en pobre y atrasado. Lo que no narra Galeano es que la rica Corona española desde sus inicios se dedicó a exportar sus metales preciosos sin preocuparse por crear otras fuentes de ingreso. Inglaterra, que no poseía minas, se vio en la necesidad de fundar manufacturas que la conducirían a la era preindustrial, mientras que la