La corrupción y los "Ni-Ni"

En mayo, el innombrable mostraba orgulloso la plataforma de perforación Aban Pearl que se convertiría en la primera estructura para explorar gas costa afuera operada totalmente por personal técnico de la nueva PDVSA socialista.

Días después, la armazón se hundió y el candidato a la perpetuidad, sin ni siquiera mencionar el fiasco, felicitó al personal por haber evitado mayores consecuencias. Después se supo que se trataba de una plataforma chatarra que había sido alquilada con sobreprecio tras negociaciones oscuras y turbulentas.

Ante la continua e interminable aparición de ciento de miles de toneladas de comida podrida, se descubrió que la negligencia no fue el factor primordial en el escándalo, sino que los negocios que rondaron la importación de alimentos por parte del chavismo fueron abundantes y muy variados.

Desde 2009 existen demandas contra el Gobierno venezolano por la anulación de contratos multimillonarios a compañías internacionales, después que éstas se negaron a pagar sobornos o comisiones. También se buscaban empresas corruptas que permitiesen agregar sobreprecio a la factura original.

Otra modalidad consistía en comprar a precios de gallina flaca lotes de alimentos con fecha de vencimiento cercana. Una vez completado el trato con dólares preferenciales, abandonaban los contenedores porque ya el negocio estaba hecho, o los exportaban a otros países para ser convertidos en comida para animales. Probablemente por esa razón el buque de comida dirigido a Haití fue devuelto.

La corrupción reinante, la depravación de la campaña electoral, los apagones, la inseguridad, el cierre de bancos, los ataques a la Polar y a Globovisión están a la vista y sin embargo, la mitad de los electores aún se definen como "Ni-Ni". Que oiga quien tiene oídos...


Ernesto García Mac Gregor