Si yo fuera....


Si yo fuera pobre de vocación y no tuviera preparación, ansias de superación, casa, trabajo u oficio fijo y estuviera con el rancho ardiendo y full de hijos naturales irresponsablemente tirados por doquiera, votaría sin titubear por el innombrable para seguir pegado a la tetilla del Estado sin necesidad de trabajar. ¿Cómo no hacerlo si me ofrecen casa, terreno que invadir, servicios públicos, negocios que expropiar y todo sin hacer nada a cambio? Allí está representado el 42 por ciento de la población conformados por los estratos D y E, que representan el voto duro chavista.

Esto significa que casi la mitad de la población no genera entradas ni para siquiera mantenerse. No sólo no producen, sino que necesitan de la ayuda oficial permanente para subsistir (de la cual se aprovecha el dictador para atornillarse en el poder). La mayoría de las misiones socialistas tiene fines proselitistas (comprar votos) y populistas (regalar dinero) y en realidad producen muy pocos cambios sustanciales.

De esta manera, los pobres se hacen totalmente indispensables para "la revolución", porque sin ellos no se ganan elecciones. Pobre que se supere y compre una casa, un automóvil o un negocio (tenga propiedad privada) se convierte en un enemigo potencial del proceso, porque va querer defender lo suyo. Con razón un próspero capitalista decía: "Muéstrame a un obrero con grandes ambiciones y en él encontrarás un hombre que puede cambiar la historia. Muéstrame a un hombre conformista, y en él hallarás a un simple obrero".

Si yo fuera un socialista soñador estaría conmovido por la actuación de loscadetes de la Armada, que postrados de rodillas en franca adoración recibieron al comandante en el aeropuerto.Si fuera un tonto idealista aún contagiado por la plaga del sarampión comunista universitario, y totalmente alejado de la realidad del fracaso socialista mundial votaría por el PSUV. Que oiga quien tiene oídos...






Ernesto García Mac Gregor

Comentarios

Entradas más populares de este blog

¿Manuel Rosales preso?

Renuncia al PSUV