Manual para destruir a un país
Manual para destruir a un país
Construye un gobierno de incompetentes y de exclusiones y tendrás el camino expedito para el fracaso del país
Construye un gobierno de incompetentes y de exclusiones y tendrás el camino expedito para el fracaso del país
Irrumpe contra el pasado: Haz campaña de descrédito sobre todo lo anterior a ti. Desencadena una verborrea aniquiladora del pasado con frases como “los años podridos“
Promete paraísos terrenales: Ofrece con verbo apasionado un futuro bonito, con expresiones como “la suma de la felicidad social”, esto es infalible para sumar incautos. Deja claro que el presente es un eslabón de sacrificio, vive entre el pasado y el futuro. Las carencias de hoy son necesarias para construir la abundancia del mañana. Por supuesto no seas el ejemplo, ¡vive a plenitud¡
Habla mucho y haz muy poco: Encadénate a sol y sombra y construye a fuerza de palabras y saliva grandes edificaciones, puentes avenidas, fábricas, hospitales. Resuelve problemas sociales como el abandono infantil con afirmaciones como “voy a dignificar a los niños de la calle” pero asegúrate que sea solo en palabras. Construye un mundo imaginario y hazlo creíble con el uso y abuso de la propaganda oficial.
Concéntrate solo en la política: Refúgiate en la política, en especial para perseguir a los adversarios, procura dividir al país, llenarlo de odio. Exacerba la violencia, la desconfianza y el miedo.
Olvídate de la gestión: Construye un gobierno de incompetentes y de exclusiones y tendrás el camino expedito para el fracaso del país. Regala el dinero de la nación a otros países y permite que se roben lo que queda. Rodéate de incapaces y corruptos. Esto no falla.
Ármate de una idea de salvación: Saca de los viejos baúles los añejos metarelatos y dale un matiz moderno con frases como “socialismo del siglo XXI” y tendrás la excusa para hacer y deshacer, siempre en nombre de la patria.
Hazte un Dios: Conviértete con la fuerza rastrera de los aduladores en un Dios,somete a todos los poderes a tus designios y no permitas un Vice-Dios, este siempre es ateo e iría por tu cabeza.
Nunca dejes de destruir: No te conformes con hundir al país debes luchar por hacerlo polvo cósmico. Si te toca entregar el poder retrasa la entrega para intensificar el daño y raspar la olla, no dejes ni un centavo. Claro, si los ganadores te lo permiten.
Comentarios