¿Hacia dónde vamos, Generales?
Leocenis Habla Claro: ¿Hacia dónde vamos, Generales?
Caracas, 31 de marzo del 2013. El
periodista Leocenis García nos presenta su destacada columna “Leocenis
Habla Claro”, la cual también podrás leer en la edición 130 del
Semanario 6to Poder. A continuación el texto original.
Quiero escribirles aunque esta carta sea
incomprendida. Escribo sabiendo que la política tiene su cara oficial,
esa que muestra unidad, esa que muestran los militares que respetan a
quien en realidad no soportan, esa que muestra lealtad a quien no la ha
ganado.
Nunca antes, la verdad, yo había visto
tan en peligro al país. Yo, de verdad, puedo decir que el pragmatismo se
alejó del chavismo. Todos ahí saben que el Presidente Chávez les dejó
un problema, y que Nicolás puede ser un hombre leal a quien ya no
existe, pero no es un líder.
¿Hacia dónde vamos, señores Generales?
Yo quiero que me respondan de hombre a hombre, de corazón a corazón,
categóricamente y sin esguinces, sin que intervenga la pasión política
que a ratos enturbia la mente de los hombres: ¿Sienten que la autoridad
de Nicolás Maduro está basada en algo de contenido jurídico, político o
social? ¿Es el producto de una elección -siquiera amañada para
satisfacer la escurridiza opinión internacional- o el hombre aparece de
pronto por el capricho de unos señores (los cubanos) que manipularon al
Presidente Chávez en su lecho de enfermo?
¿Qué es en el fondo, señores Generales,
esto que hoy tenemos al frente? No puedo silenciar mis pensamientos.
Nací a la vida pública junto con Chávez, estuve preso dos veces en su
gobierno, una en la cárcel de Tocuyito y otra en el Sebin. Ahora, una
vez que el Presidente ha desaparecido, veo de pronto un vasto escenario
dramático, veo cómo un señor menea la cabeza y baila como su único
aporte electoral mientras los que le acompañan en cada mitin le miran
perdidos, añorando al líder que fue Chávez y meditando sobre la
tragedia de quien ha sido elegido para sucederlo.
¿Qué pasó, señores Generales, con el
Presidente Chávez? ¿Quiénes y con qué intenciones lo enviaron en
diciembre a Cuba para que durará dos días, comunicara su sucesión y
luego enmudeciera? ¿A quién benefició aquello? ¿Por qué debemos creer
que al Presidente lo envenenaron y por qué no pensar que algunos
intereses conspiraron para que el Presidente muriera de una enfermedad
de la que el propio director del Hospital Militar, hombre de confianza
del Presidente, no supiera nada?
¿Hacia dónde vamos hoy? ¿Hacia el mar de
Cuba? ¿Es eso lo que queremos? Si es así, les ruego que me muestren al
primer cubano que se lance al mar desde Miami, contra los tiburones,
para ir a las costas de La Habana. Por el contrario, son los cubanos que
viven en la isla los que se lanzan al mar para ir a Miami. La felicidad
no debe estar en el modelo cubano.
Vuelvo a preguntarles ¿Hacia dónde vamos, Generales?
Con información del Semanario 6to Poder.
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