Un extraño monólogo
El anciano que esporádicamente me visita se acercó y después de saludarme me dijo: "Debes saber que la vida es un extraño e inmenso salón de clases, donde todos, sin excepción alguna, son simultáneamente alumnos y maestros, porque todos los seres humanos tienen algo que enseñar a otros y mucho que aprender de los demás. Un sabio puede aprender de un analfabeta los secretos que la vida le ha enseñado. En realidad la sabiduría consiste en reconocer la propia ignorancia. Sócrates, uno de los hombres más sabios de la antigua Grecia, solía decir: 'Solo sé que no sé nada'. Te preguntarás, si era sabio, ¿por qué decía no saber? Te respondo: Sócrates sabía que sabía, pero por eso mismo sabía que lo que le faltaba por saber era mucho más de lo que ya sabía. Sus conocimientos eran pocos comparados con lo que ignoraba. Esto deberían deducirlo todos los humanos, especialmente los que gobiernan y los que enseñan. Es raro el gobernante que llega al poder sabiendo gob...